El segundo día
de Triduo Fray Ricardo de Córdoba se fija en la Anunciación. Una
Anunciación esperada con Esperanza. Contempla cómo Dios preparó de alguna
manera a José, para decirle que María se
quedaría encinta sin conocer varón. Él, con gran aturdimiento, repudia a María
en la intimidad. Comprendiendo más tarde esa noticia. También María, esa mujer virgen elegida para llevar dentro
de su ser al Salvador. Esa Virgen, que espera esa Esperanza que el mundo
también espera. De ahí Inmaculada, como la patrona de la Hispanidad y de los
Franciscanos. San Francisco, se queda con la Esperanza del Salvador.
Además, vemos a
lo largo de los tiempos todas las anunciaciones e inmaculadas plasmadas en el
arte. Por ultimo Fray Ricardo termina con un poema con la Esperanza como tema
principal.