Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Jerez de la Frontera

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domingo, 26 de octubre de 2014

Curiosa fotografía histórica

Unión de Hermandades de Jerez presidida por José Salido Paz. En la foto de los años setenta del pasado siglo podemos reconocer con palmas a conocidos cofrades de la época como Francisco Rodríguez Romero, Juan Gonzalez García, Juan Cervilla o a quien fuese durante años Hermano Mayor de nuestra Hermandad de las Cinco Llagas José Pérez Raposo.


Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas celebró este pasado viernes sus tradicionales rezos semanales

Aprobado el cambio de sede por los Hermanos Mayores

Fuente: Unión de Hermandades de Jerez. En la mañana de hoy se ha celebrado en el Palacio Garvey el Pleno extraordinario para el cambio de sede del Consejo Directivo de la Unión de Hermandades de Jerez, tras la visita efectuada al Edificio.

El Pleno de hermanos Mayores ha aprobado el cambio y futuro traslado de sede. Dichas instalaciones, sita C/ Sevilla, 15, en las inmediaciones de la Plaza del Mamelón, conformará una sede digna de la institución que representan las hermandades en nuestra ciudad.

Respecto a la posible cesión de instalaciones del Ayuntamiento, los hermanos mayores han decidido el seguir estudiando las ubicaciones de estos y la adecuación oportuna a todas las necesidades globales que tienen las hermandades actualmente.


Evangelio y comentario



XXX Domingo del Tiempo ordinario
Amar: la tarea de la vida



Los fariseos se acercan a Jesús con una pregunta de respuesta casi evidente: ¿Cuál es el mandamiento principal de la Ley? La contestación podría darla cualquier niño de nuestras parroquias que asistiese a la catequesis: Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo. Sin embargo, los que cuestionan al Señor, lo hacen desde el conocimiento de que los judíos contaban nada menos que con seiscientos trece mandamientos. Y se preguntaban: ¿Todos tienen el mismo valor?, o ¿hay algunos que son más importantes que otros?
La respuesta de Jesús establece una prioridad, una jerarquía a la hora de vivir conforme al deseo del corazón de Dios, que sigue interpelando al creyente de hoy. En primer lugar, nos exige revisar si nuestra relación con Dios es todo lo profunda que este mandamiento reclama. Es decir, si el amor a Dios nos lleva a amar, de verdad, lo que Él ama. Muchas veces nos conformamos con querer amar a Dios en abstracto y no nos preocupamos por amar su querer. Eso entraña el peligro de que no pongamos excesiva atención en sus mandamientos, que nos ayudan a concretar, como nos muestra la primera lectura de la Misa de hoy, y nos conformemos con asentir teóricamente a su propuesta amorosa. El resultado podría ser un tanto decepcionante: podemos no estar amando de veras a Dios, que quiere que amemos su querer.
La grandeza del amor a Dios y a los hermanos, que Jesús propondrá como contenido fundamental del mandamiento nuevo, nos introduce en el misterio mismo de lo que el amor significa. Por un lado, nos ayuda a descubrir la esencia misma de lo que Dios es: amor (véase 1 Jn 4, 8). Por otro, nos ayuda a descubrir que en el amor al prójimo, amándole como a mí mismo, podemos encontrarnos con nosotros mismos y comprendernos plenamente. El Papa san Juan Pablo II lo expresará con gran claridad: «El hombre no puede vivir sin amor. Él permanece para sí mismo un ser incomprensible, su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y lo hace propio, si no participa en él vivamente» (Redemptor hominis, 10). Esa relación de amor y correspondencia del hombre con Dios se convierte en camino de vida y vocación auténtica para el hombre de todos los tiempos: «Dios es amor y vive en sí mismo un misterio de comunión personal de amor. Creándola a su imagen y conservándola continuamente en el ser, Dios inscribe en la humanidad del hombre y de la mujer la vocación y, consiguientemente, la capacidad y la responsabilidad del amor y de la comunión. El amor es, por tanto, la vocación fundamental e innata de todo ser humano» (Familiaris consortio, 11).
Dios nos llamó a la existencia por amor y nos llama a amar. Ésa es la tarea fundamental del hombre y la única que verdaderamente puede dar sentido a nuestra vida. Amar a Dios y a los hombres, dos retos que plasman muy bien el querer de Dios y que se convierten para nosotros en prioridad para nuestra vida cristiana. ¡Ése es el principal de todos los mandamientos!
+ Carlos Escribano Subías
obispo de Teruel y Albarracín


Evangelio
En aquel tiempo, los fariseos, al oír que había hecho callar a los saduceos, se acercaron a Jesús, y uno de ellos le preguntó para ponerlo a prueba:
«Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?»
Él dijo:
«Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser. Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Estos dos mandamientos sostienen la Ley entera y los Profetas».
Mateo 22, 34-40

El Papa Francisco ha beatificado a Pablo VI

El Papa Francisco ha beatificado a Pablo VI

El Papa Francisco beatificó este domingo a su predecesor Pablo VI en una multitudinaria ceremonia en la Plaza de San Pedro, donde se destacó su gran labor evangelizadora y papel como gran timonel de la Iglesia, especialmente durante el Concilio Vaticano II y los años siguientes. La reliquia del nuevo Beato es una camiseta con su sangre, consecuencia del atentado que sufrió el 27 de noviembre de 1970 en el Aeropuerto Internacional de Manila (Filipinas), cuando una persona con problemas mentales que se había disfrazado de sacerdote se acercó con una daga para herirlo dos veces.
19/10/14 11:43 AM
 (ACI/InfoCatólica) Así, al pronunciar la fórmula de beatificación, el Papa dijo que «nosotros, acogiendo el deseo de nuestro hermano Luciano Monari, Obispo de Brescia, de muchos otros hermanos en el Episcopado y de muchos fieles, luego de haber tenido el parecer de la Congregación de las Causas de los Santo, con Nuestra Autoridad Apostólica concedemos que el Venerable Siervo de Dios Pablo VI, Papa, de ahora en adelante sea llamado Beato y que pueda celebrar su fiesta, en los lugares y de acuerdo a las reglas establecidas por el derecho, cada año el 26 de septiembre. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo».
A la ceremonia también asistieron Benedicto XVI y los cardenales Paulo Evaristo Arns y William Wakefield Baum. Los tres fueron creados cardenales por el ahora beato.
El Beato Pablo VI nació en Lombardía (Italia) el 26 de septiembre de 1897 y falleció en Castel Gandolfo el 6 de agosto de 1978, tras un pontificado de 15 años iniciado en 1963.
El milagro que hizo posible la beatificación sucedió en los Estados Unidos en 2001, cuando un feto en el quinto mes de embarazo entró en condiciones críticas por la rotura de la vejiga fetal, la presencia de líquido en el abdomen, y la ausencia de líquido en la bolsa amniótica. El diagnóstico médico preveía la muerte del niño en el vientre materno, o si sobrevivía indicaba inevitables malformaciones.
Aconsejaron a la madre que interrumpiera el embarazo, pero ella rechazó la propuesta del aborto. Acompañada por una religiosa italiana recurrió a la intercesión de Pablo VI. A continuación la situación fue mejorando y el niño nació bien a los ocho meses en un parto por cesárea.
La consultoría médica de la Congregación para las Causas de los Santos, certificó el 12 de diciembre pasado lo inexplicable de la curación desde el punto de vista de la ciencia médica y el 18 de febrero los teólogos del dicasterio reconocieron que el milagro había sucedido por la intercesión pedida a Pablo VI.
El Beato protagonizó importantes cambios en la Iglesia. Algunos de naturaleza ecuménica, como su célebre abrazo con el patriarca Atenágoras en 1964 y el mutuo levantamiento de excomuniones. Otros, de índole pastoral, como haber iniciado la era moderna de los viajes pontificios con visitas a los cinco continentes, así como a Tierra Santa y la ONU. Además promulgó en 1969 la reforma litúrgica.
Las encíclicas escritas por el beato son Ecclesiam Suam (6 de agosto de 1964), Mense Maio (29 de abril de 1965), Mysterium Fidei (3 de septiembre de 1965), Christi Matri (15 de septiembre de 1966), Populorum Progressio (26 de marzo de 1967), Sacerdotalis Caelibatus (24 de junio de 1967), y Humanae Vitae (25 de julio de 1968).

domingo, 19 de octubre de 2014

De nuevo Fernando Morales proporciona una magnífica instantánea de la salida de nuestra cofradía de las Cinco Llagas

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas celebró este pasado viernes sus tradicionales rezos semanales

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas asistió institucionalmente a la primera ponencia del Aula de Historia del programa de actos del 400 aniversario que la Hermandad de la Coronación de Espinas organiza con la colaboración del Centro de Estudios Históricos Jerezanos

Evangelio y comentario

XXIX Domingo del Tiempo ordinario
La imagen de Dios

Jesús, una vez más, habla sin doblez y con autoridad con aquellos que pretenden tenderle una trampa nada sutil y que terminarán por entregarle a la muerte. Es curiosa la alabanza que recibe por parte de sus interlocutores cuando le plantean el problema. Sus palabras describen a la perfección quién es Jesús y lo que está haciendo: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad..., y no miras lo que la gente sea». Lo lastimoso es que esta certera descripción no traspasa el corazón de quienes la pronuncian. Su deseo no es conocer esa verdad que Jesús enseña. Su intención es otra. Parece que conocen bien a Jesús, podríamos decir que la teoría se la saben, pero lo curioso es que ese conocimiento no incide lo más mínimo en ellos. No dejan que entre en sus vidas.
Si nos paramos a pensarlo, el contexto cultural en el que nos movemos actúa de forma parecida. Incluso, en ocasiones, los propios cristianos podemos caer en la misma tentación. Decimos conocer perfectamente a Dios, tanto que intentamos encasillarlo y pretendemos reducirlo hasta el punto de ser nosotros quienes lo dominemos, impidiéndole que nos sorprenda. Nuestro problema, y el problema de nuestro entorno cultural, es el mismo que encuentran los protagonistas del Evangelio: que el Señor rompe barreras y hace vivo y eficaz aquello que pretendía ser una bella e inocua descripción teórica. Él sí que recorre el camino que va de la teoría a la vida.
En este contexto, no deja de ser curiosa la actitud de los que quieren comprometerle con una pregunta envenenada. Su intención es introducir a Jesús en un intrincado debate político y pedirle que se decante a la hora de dar una solución. Ellos saben que, de acuerdo a la pregunta planteada, diga lo que diga le va a ser complicado escapar al ardid que le han tendido. Si dice que hay que pagar el impuesto, se sitúa frente a los esfuerzos del pueblo elegido por liberarse políticamente de la dominación romana. Si su respuesta es negativa, se convierte en un rebelde contra la autoridad del Imperio. Parece que la situación del país, y en el plano en que se plantea la cuestión, no deja espacio a una tercera vía. Pero Jesús no se deja encerrar en el plano político sin más. Lo trasciende. La respuesta que da a aquellos hombres es brillante y vibrante. No se sale por la tangente, sino que les comunica un mensaje que está a la altura de la alabanza que le habían dedicado.
El juego de palabras de Jesús es audaz: ¿De quién es la cara de la moneda? Pues pagadle al César lo suyo. Y ahí es donde entra la segunda parte de la afirmación: Pero dad a Dios lo que es de Dios. Si intentamos completar el razonamiento de Jesús, es importante analizar qué o quién contiene la imagen de Dios. Y basta recordar el relato de la creación del hombre en el libro del Génesis para caer en la cuenta de que es el hombre el que está creado a imagen y semejanza de Dios, con todas las irrenunciables consecuencias que esa afirmación conlleva.
La solución que propone Jesús rompe cualquier expectativa. No sólo sale del atolladero que le han planteado, sino que les anuncia la Buena Noticia: si estamos creados a imagen de Dios, nuestra existencia debe aspirar a entregarnos a Él. Ése es, entonces y siempre, el camino auténtico que lleva a la felicidad. Y de ello debemos ser los creyentes testigos, a pesar de las dificultades que puedan surgir.
+ Carlos Escribano Subías
obispo de Teruel y Albarracín

Evangelio
En aquel tiempo, los fariseos se retiraron y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta. Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron:
«Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no te fijas en las apariencias. Dinos, pues, qué opinas: ¿es lícito pagar impuesto al César o no?»
Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «¡Hipócritas!, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto».
Le presentaron un denario. Él les preguntó: «¿De quién son esta cara y esta inscripción?» Le respondieron: «Del César».
Entonces les replicó: «Pues pagadle al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios».
Mateo 22, 15-21

viernes, 17 de octubre de 2014

Una pintura del Ecce Homo, obra de Jesús Jerónimo Jiménez Cabral, será el cartel anunciador de la Semana Santa de Jerez 2015

Una obra del pintor jerezano, Jesús Jerónimo Jiménez Cabral, será la base del cartel anunciador de la Semana Santa de Jerez 2015.

Jesús Jerónimo Jiménez Cabral es licenciado en Bellas Artes y profesor del Instituto de Enseñanza Secundaria Fernando Savater de nuestra ciudad.

En su curriculum con alta experiencia profesional, incluye trabajos en galerías de la zona y cuenta con primeros premios en certámenes provinciales de pintura.

Reconoce vinculación cofrade con las hermandades de Soledad y Amargura y es gran amante de la Semana Santa.

La obra ganadora lleva por título “La caña”.


Jesús Jerónimo Jiménez Cabral.
Jerez de la Frontera, Cádiz, 1969.
657 52 74 23


Misa de Hermandad del pasado viernes: "Si yo amo a mis hermanos, tendré que perdonarlos también"

Nuestro director espiritual, José Luis Salido, durante la Misa de Hermandad del pasado viernes: “Jesús durante su vida no se dedica a ir al templo. Jesús se retira al monte, a la soledad, el espíritu lo lleva a la soledad a orar. En varias ocasiones lo vemos retirarse de la multitud, incluso de sus apóstoles, a orar. Son los dos puntos fundamentales: la paternidad de Dios y la oración. El diálogo con el Padre es la oración. Por eso debe ser algo también fundamental para nosotros, sus discípulos. Sentir a Dios como mi padre. Y entonces necesariamente tendremos que acudir a Él en la oración. Si yo amo a mis hermanos, tendré que perdonarlos también. Necesitamos rezar el padrenuestro tratando de comprender lo que estamos diciendo”.


viernes, 10 de octubre de 2014

Recordatorio: hoy Misa de Hermandad en la Capilla del Voto

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas participa en la procesión cívico-religiosa del día de San Dionisio

Evangelio y comentario



XXVIII Domingo del Tiempo ordinario
¿Cómo es mi respuesta a Dios?


Conmueve ver el interés, por parte de Dios, de invitarnos a participar del banquete de las bodas del Hijo. Cuestiona, a su vez, la actitud de aquellos hombres que rechazan la invitación, mostrándose indiferentes ante un corazón generoso que les hace partícipes, de manera gratuita y desinteresada, de un gran don. La sentencia definitiva con la que concluye el Evangelio que se proclama este domingo: «Muchos son los llamados y pocos los escogidos», resume perfectamente el contenido del mensaje de Jesús.
La imagen del banquete es muy sugerente para los contemporáneos de Jesús. Isaías lo utiliza para profetizar la era mesiánica (Isaías 25,6). La Iglesia naciente lo recogerá también en el libro del Apocalipsis al describir la boda del Cordero (Ap. 19, 7). Podemos decir que la invitación original que recibió el pueblo elegido se perpetúa en la historia de la Iglesia y en nuestra historia personal.
Observando las respuestas que describe Jesús, puede resultar interesante detenernos por un momento a analizar la nuestra. La primera cuestión es ver si hemos desairado la invitación. Analizando nuestra relación con Dios, podemos encontrarnos con actitudes semejantes a las de los personajes de la parábola que, como a ellos, nos conduce a no acoger al Señor plenamente en nuestra vida, ni a participar con determinación en los trabajos de su Reino. Seguro que son muchas nuestras obligaciones y ocupaciones y el tiempo es escaso. Una atenta observación de las prioridades de nuestra jornada, nos llevará a descubrir qué es en realidad importante en nuestra vida y qué lugar ocupa Dios en ella.
El final de la parábola también nos resulta sugerente. Aquel hombre que se encuentra en la sala del banquete vestido de manera inapropiada, enseguida descubre su falta de cortesía, pues, ante la indicación del anfitrión, no abrió la boca. La hospitalidad oriental mandaba facilitar ropa adecuada para los invitados. No utilizarla suponía un desaire hacia quien la ofrecía. El Señor nos ofrece revestirnos de Cristo como propuesta segura a la hora de andar nuestro camino en la vida. Es lo propio de quien ha recibido el Bautismo convirtiéndose, por la acción de la gracia, en evangelizador. Quizá nosotros, como el invitado del Evangelio, preferimos revestirnos de nosotros mismos, manteniendo vigente al hombre viejo como expresión de un Bautismo olvidado y un Evangelio no asumido.
Revestirse de Cristo, del traje apropiado que nos ofrece nuestro anfitrión para participar del banquete, sugiere el revestirnos del hombre nuevo que, en expresión paulina, supone revestirse de «entrañas de misericordia, de bondad, de humildad, mansedumbre, paciencia, soportándoos unos a otros y perdonándoos mutuamente, si alguno tiene queja contra otro...; y, por encima de todo esto, revestíos de amor, que es el vínculo de la unidad perfecta».
El Señor nos convida con una generosidad desbordada y desbordante. Ver si acudimos a su llamada y cómo lo estamos haciendo, supone para nosotros un gran reto. El Señor desea, de corazón, escogernos definitivamente. Por eso nos ha llamado.
+ Carlos Escribano Subías
obispo de Teruel y Albarracín


Evangelio
En aquel tiempo, volvió a hablar Jesús en parábolas a los sumos sacerdotes y a los senadores del pueblo, diciendo:
«El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisara a los convidados, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados encargándoles que les dijeran: Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas y todo está a punto. Venid a la boda.
Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios, los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados: La boda está preparada, pero los invitados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis convidadlos a la boda. Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales.
Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta, y le dijo: Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta? El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros: Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes. Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos».
Mateo 22, 1-14

domingo, 5 de octubre de 2014

Publicamos una magnífica fotografía que nos envía nuestro querido hermano Manuel Piñero Dueñas

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas asiste institucionalmente al acto de presentación de actos de los 400 años de la fundación de la Hermandad de la Coronación de Espinas

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas celebró este pasado viernes sus tradicionales rezos semanales

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas asistió institucionalmente a la Misa de la Festividad de San Francisco de Asís

Nuestra Hermandad de las Cinco Llagas asistió institucionalmente a la Misa de la Festividad de San Francisco de Asís este pasado sábado tarde noche. Destacamos a continuación algunos de los fragmentos de la predicación de nuestro director espiritual José Luis Salido:
-         La Fe es Dios
-         Pablo se siente ligado a la persona de Jesus. Su cielo será Cristo.
-         Solamente a medida que el hombre se va enamorando de Cristo, se va tornando verdaderamente cristiano. Con San Francisco sucede algo parecido. Es la persona de Jesús que surge inmediatamente ante su mirada infantil y extasiada. La persona de Jesús en primer plano, grande, bella, luminosa, encantadora, avasalladora. Todo lo demás se diluye y se pierde en la sombra. Queda solo ella: la persona de Jesús.
-         Ante la persona de Jesús, la actitud de Francisco es todo amor. Podría ser la curiosidad, de interés, de temor, pero no. Es todo gratitud, asombro, encanto.
-         Para Francisco los hechos de la historia cristiana –la Encarnación, la pasión y la muerte, la resurrección, la Eucaristía- son, antes que nada, iniciativas y manifestaciones del amor de Dios.


Fuente: Unión de Hermandades de Jerez. La imagen de la Sagrada Cena de Nuestro Señor Jesucristo ha sido elegida para presidir el Vía Crucis de las Hermandades

Fuente: Unión de Hermandades de Jerez. La imagen de la Sagrada Cena de Nuestro Señor Jesucristo ha sido elegida para presidir el Vía  Crucis de las Hermandades.
                                           
A falta de concretar los detalles, el Vía Crucis tendrá lugar el próximo 23 de febrero de 2015, primer lunes de Cuaresma.



Antonio Moure Sánchez será el pregonero de la Semana Santa de Jerez 2015

Fuente: Unión de Hermandades de Jerez. Antonio Moure Sánchez, ha sido designado por el Consejo Directivo de la Unión de Hermandades pregonero de la Semana Santa 2015, acto que tendrá lugar el próximo 22 de Marzo, antiguo Domingo de Pasión, en el teatro Villamarta.

Nacido en Jerez el 2 de Abril de 1972, Antonio Moure, es periodista de profesión y licenciado en Derecho por la Universidad de Cádiz. Cofrade y hermano de las Tres Caídas y Cristo de la Expiración.

Entre sus intervenciones destacan el Pregón del 425 aniversario de la Hermandad del Cristo de la Expiración, en el año 2004 el pregón de la Coronación Canónica de María Santísima de la Concepción, Cincuentenario de la Hermandad de la Viga o el pregón del 200 aniversario de la imagen de la Virgen de la Soledad. Siendo anteriormente pregonero de nuestra Semana Santa en el año 1998.

El pregonero de la Semana Santa de Jerez 2015 será presentado el próximo lunes, día 6 de octubre, en el transcurso de una rueda de prensa que se llevará a efecto a las 20 horas en la sede de la Unión de Hermandades, sita en calle Curtidores, 3.


Evangelio y comentario

XXVII Domingo del Tiempo ordinario
Destierro de Dios



Como suele ocurrir en las celebraciones eucarísticas dominicales, el Evangelio que se proclama desvela mejor su sentido a la luz de la primera lectura. Jesús predica en el templo de Jerusalén. En la escena que contemplamos este domingo, sigue el diálogo comenzado por Jesús la semana pasada, ante sus mismos interlocutores. Pone ahora el ejemplo de una viña de la que su propietario es despojado.
La imagen de la viña aparece también en la primera lectura de Isaías. Es deliciosa la introducción que hace el profeta en la que presenta a Dios hablando al corazón de su pueblo: «Voy a cantar... un canto de amor». El dueño de la viña se desvive por ella y, en vez de obtener el fruto previsto, recoge agrazones. Los frutos buenos que Dios espera cosechar, derecho y justicia, se tornan en asesinatos y lamentos. Ante este bello relato, es imposible no sentirse interpelado, en primera persona, sobre la calidad de nuestra respuesta ante la diligencia que en nuestro cuidado pone un Dios Providente y enamorado de la Humanidad.
En el Evangelio vuelve a aparecer la viña, pero el problema ahora ya no son los frutos que se recogen, sino la actitud de los labradores desafiantes que quieren hacerse con la propiedad de aquel terreno. El planteamiento de aquellos hombres dibuja un escenario dramático. Describe lo que el pueblo elegido hizo con los profetas y anticipa con lo que harán con el Hijo del Padre. Pero la parábola no sólo describe aquel momento. Apunta al futuro, protagonizado por el hombre de hoy, en el que se puede pretender que Dios desaparezca, como hicieron aquellos labradores homicidas. En palabras de Benedicto XVI: «Los arrendadores no quieren tener un patrón y estos arrendadores nos sirven de espejo a nosotros, hombres, que usurpamos la creación que se nos ha confiado en gestión. Queremos ser los dueños en primera persona y solos. Queremos poseer el mundo y nuestra misma vida de manera ilimitada. Dios nos estorba, o se hace de Él una simple frase devota, o se le niega todo, desterrándolo de la vida pública, hasta que, de este modo, deje de tener significado alguno» (Homilía en la Inauguración del Sínodo de los Obispos sobre la Eucaristía: 2 de octubre de 2005).
Aquellos hombres, dirán los interlocutores de Jesús, merecen ser ejecutados en justicia y perderán la confianza que Dios había depositado en ellos. El problema de este destierro forzado al que sometemos a Dios, es que sume al hombre en una situación desconcertante, a la par que aleccionadora. Desconcertante, pues los que estaban destinados a la vida, encuentran la muerte. Aleccionadora, pues nos ayuda a valorar, en su justa medida, lo que nos jugamos al construir nuestra vida y nuestra sociedad, dependiendo del papel real que le otorguemos a Dios.
Pero la desesperanza no es la que cierra el relato. Jesús, en esta ocasión, prolonga el contenido de la parábola con una brillante alusión a la Escritura: «La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular». Él es consciente del rechazo que suscita y de su final. Por eso anima a que seamos capaces de interpretar con la clave adecuada la partitura de nuestra vida, de la vida de la Iglesia y de la vida del mundo. Cristo es esa clave, es la roca sobre la que todo se edifica.
+ Carlos Escribano Subías
obispo de Teruel y Albarracín

Evangelio
En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los senadores del pueblo:
«Escuchad otra parábola: Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, construyó la casa del guarda, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. Llegado el tiempo de la vendimia, envió sus criados a los labradores para percibir los frutos que le correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno, mataron a otro, y a otro lo apedrearon. Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último, les mandó a su hijo diciéndose: Tendrán respeto a mi hijo. Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron: Éste es el heredero; venid, lo matamos y nos quedamos con su herencia. Y, agarrándolo, lo empujaron fuera de la viña y lo mataron.
Y ahora, cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?»
Le contestan: «Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores que le entreguen los frutos a sus tiempos».
Y Jesús les dice: «¿No habéis leído nunca en la Escritura: La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente? Por eso os digo que se os quitará a vosotros el reino de los cielos y se dará a un pueblo que produzca sus frutos».
Mateo 21, 33-43