Agradeciendo
siempre de antemano la atención que en estos momentos difíciles dedica nuestro
obispo, monseñor Mazuelos, no sólo a las personas que en su diócesis sufran de
manera grave el azote de esta pandemia sino también a la inquietud que puede
asolar a los cofrades tras la lógica y sensata suspensión de las estaciones
penitenciales -que no de la
Semana Santa-, y mostrando siempre respeto por cualquier
iniciativa en aras al mejor aprovechamiento de las jornadas de la Semana Mayor , esta
Hermandad de las Cinco Llagas no obstante optó por declinar la amable propuesta
que se nos elevó para así evitar poner en peligro la salud del Hermano Mayor o
de cualquier hermano en quien pudiese delegar -y porque en este caso, y al
encontrarse la dirección espiritual de la Hermandad confinada en Cádiz y además vernos en
la necesidad de comprometer a algún hermano a tener que abrir la iglesia de San
Francisco- se incrementaría aún más si cabe la peligrosidad de esta
sobrexposición (tan desaconsejada por las autoridades sanitarias).