La portuense parroquia de San Francisco y las jerezanas Hermandades de las Cinco Llagas y Amor y Sacrificio celebraron este pasado viernes una mesa redonda dedicada a la memoria del sacerdote jesuita Pedro Guerrero González con motivo del cuarenta aniversario de su fallecimiento
Continuando con la programación de actos que la Parroquia de San Francisco de El Puerto de Santa María –con la Asociación del Apostolado de la Oración a la cabeza- y las hermandades jerezanas de las Cinco Llagas y Amor y Sacrificio vienen desarrollando con motivo del cuarenta aniversario del fallecimiento del padre jesuita Pedro Guerrero González, este pasado viernes tuvo lugar una mesa redonda en torno a la figura del mencionado Siervo de Dios que tanta ejemplaridad cristiana evidenciara durante toda su fecunda vida religiosa. Fue en el patio central de la mencionada portuense Parroquia de San Francisco donde, bajo la moderación del sacerdote jesuita Fernando García Gutiérrez, tomaran asiento –en calidad de contertulios- Genaro Benítez Gil, Ignacio García Pomar, Manuel y Pablo Guerrero Pemán, Joaquín Merello y el párroco de la misma Antonio Olmo.
De nuevo la respuesta de público tanto de vecinos de El Puerto de Santa María como de Jerez de la Frontera y Sanlúcar de Barrameda no se hizo esperar para abarrotar un aforo que agradeció sobremanera no únicamente la puntualidad del comienzo del acto sino la intensidad –muy medida en el tiempo- de los diferentes testimonios confesados en alta voz por todos y cada uno de los intervinientes. Supuso un tónico espiritual este encuentro tan redoblado de matices testimoniales. Entre los asistentes destacó una amplia representación de la Hermandad de las Cinco Llagas cuya Junta de Gobierno está organizando conjuntamente con la Asociación del Apostolado de la Oración la peregrinación a pie que el próximo sábado 28 partirá de la Capilla del Voto de la Iglesia de San Francisco de Jerez y concluirá en la capilla de la portuense Parroquia de San Francisco donde reposan los restos del padre Guerrero (este próximo lunes se emitirá una nota conjunta con todos los datos de dicha peregrinación).
Los contertulios de la mesa redonda celebrada el pasado viernes destacaron cómo el padre Guerrero “teniéndolo todo en una época tan difícil como fue la posguerra, renunció a su vida acomodada, a su holgada situación económica, para darse a los demás en una austeridad material y en una ejemplaridad evangélica digna de elogios”. Durante el transcurso del debate se relataron sorprendentes capítulos de veras milagrosos recogidos de numerosísimas personas que han encomendado casos muy personales al padre Guerrero así como anécdotas acaecidas durante la encomiable trayectoria doctrinal de “este santo ya en vida”. “Fue un ejemplo de cristiandad porque amó a sus hermanos, a sus semejantes, más que a sí mismo”, subrayaron de modo unánime.
Se adjunta fotografía de los participantes de la mesa redonda junto a algunos de los cofrades de las Cinco Llagas al término del acto.