- Hermanos costaleros
y hermanos que no salen en estación de penitencia: martes 7 de marzo de 19,00 a 21,00
horas. Casa de Hermandad.
- Hermanos
nazarenos y monaguillos que la retiraron para la estación de penitencia de la
Madrugada Santa de 2022 o aquellos que, no habiendo formado parte de la
comitiva nazarena ese año, sí lo hayan hecho con anterioridad antaño–: sábado 11 de marzo
en horario de 11:30 a 14:30 horas y de 17:30 a 20:30 horas. Casa de Hermandad.
- Hermanos nazarenos y monaguillos de
nueva incorporación para la próxima Madrugada Santa 2023: sábado 18 de
marzo en horario de 11:30 a 14:30 y
de 17:30 a 20:30 horas. Casa de Hermandad.
- P.S.: Todo hermano que no pueda retirar
el día indicado su papeleta de sitio, ha de comunicarlo previamente a la fecha
indicada al teléfono de la Hermandad (681986066).
Asimismo, todo hermano que desee
participar en la estación de penitencia como monaguillo debe participarlo a la
Diputación Mayor de Gobierno a través del hermano oficial don Raúl Pérez antes
del 9 de marzo (teléfono 605026518).
Es importante constatar que las cédulas
de sitio serán repartidas y despachadas de modo individual con el propósito
además de que los hermanos puedan confiar y transmitir en la mayor privacidad
posible aquellas circunstancias personales propias -y nunca ejerciendo de
intermediario o de portavocía de terceros- que consideren de necesaria
comunicación.
Para ejercitar la teologal virtud
de la CARIDAD, todo hermano se impondrá el deber de acercarse
a retirar dicha cédula /papeleta junto con algún litro de leche o
kilogramo alimento no perecedero para poder paliar en alguna mínima medida
los siempre tristes pormenores de los más desfavorecidos.
Respecto a
la petición de cruces y promesas, de todos es bien conocido que la
Cofradía estacionará con un número máximo de diez cruces de penitencia y
que, bajo ningún concepto o motivo aparentemente justificado, se entregará una
más. En este sentido, nuestros cofrades dilucidarán que sus promesas se
pueden plasmar de muchos modos o formas. Una de ellas, edificantísima, no es
sino continuar aquella consuetudinaria costumbre de nuestros primeros cortejos
penitenciales, cuya práctica totalidad de nazarenos tenían a bien besar con sus
pies descalzos el frío asfalto de la Madrugada. Ténganse no obstante muy
en cuenta las palabras del Venerable Papa Pío XII en su carta encíclica Mystici
Corporis Christi: “Misterio verdaderamente tremendo y que jamás se meditará
bastante: Que la salvación de muchos dependa de las oraciones y voluntarias
mortificaciones de los miembros del Cuerpo Místico de Cristo”.